16 febrero, 2007

qué me importa

llueve. hace frío. hay viento. sí, hay viento, en esta ciudad de tan poco viento. no puedo evitar pensar en Montevideo. es que el clima es tan montevideano que es imposible evitar la añoranza.
andar en ómnibus es gratis, así que hay un aire a excursión escolar y los choferes van menos estresados. la gente se sube y se baja de a paradas, evitando mojarse. ojalá la locomoción fuera gratuita siempre.
las nubes están tan bajas que las montañas no se ven, otro motivo para olvidar dónde estoy. mirar al horizonte es mirar cerca, falta el mar nomás, vaya falta inmensa.
escucho "cabrereando", otros cantan a Cabrera, algunos lo hacen mejor que otros, Cabrera es siempre Cabrera y a mí me pueden sus letras. estoy contenta. canto. me importa un bledo que me esté empapando, que me pique el abrigo de lana que no abriga nada, pero como no me importa, sigo cantando.
ese estado de no me importa para con las cosas que otros días serían fuente de molestia y mal humor es perfecto. además me subo al ómnibus y no pago y el chofer me sonríe, y yo me cebo un mate que queda espumoso y está calentito. qué me importa que haga frío.
que dure, que me dure, que sea así siempre. ojalá.



Comments:
Cambiaste de sacon.........

Drey
 
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Nihil humani a me alienum puto (Terencio)