23 noviembre, 2006

los libros me hacen llorar

recién terminé de leer con mi hermano un libro que se llama: Ámbar Dorado en cuarto y sin su amigo. el título es una mala traducción de: Ambar Brown in forth grade, de Paula Danzinger.
nos turnamos cinco páginas cada uno para avazar rápido porque mañana tiene una prueba. a mí me tocó leer las últimas páginas.
yo creo que mi hermano empezó a llorar antes, pero no me di cuenta, recién al final
cuando leí las últimas palabras y saqué la mirada del libro vi que mi hermano tenía los ojos rojos y le caían unas lagrimitas que él trataba de disimular.
Ámbar es una niña muy muy parecida a una amiga mía, pensé. porque Ámbar piensa algo así a como yo me imagino que mi amiga pensaba cuando era niña. piensa casi declarando. Ámbar dice "yo, Ámbar Dorado he decidido que quiero aprender a chasquear los dedos".
mi hermano me había anunciado antes que el libro era como para él porque a la protagonista le pasaban cosas muy parecidas a él, como que su mejor amigo se fue a vivir lejos y que sus padres se separaron.
yo nunca había visto a un niño llorar con un libro pero sé que yo lloré, me acuerdo especialmente cuánto lloré con Corazón, lloré mucho con Corazón en realidad, pero lloraba escondida.
los libros me hacían llorar pero yo lo hacía a escondidas.

creo que mi hermano agarró rápido el libro y se lo llevó a su cuarto para poder llorar sin que nadie lo viera.
y entonces pienso que él debe haber llorado mucho mientras sus padres se separaban, porque yo lloré mucho cuando mis padres se separaban.
por fin un libro infantil que es bueno de verdad.

Comments:
cuando niño recuerdo haber llorado con "Corazón", y sobre todo con "Mi planta de naranja lima", y mi hermano hasta me hacia llorar cuando me recitaba "El malevo".

marcelO
 
Mi planta naranja lima, me hiciste acordar! Ah, cuánta tristeza. Y con Platero y yo, sí, sí, mirá, no me acordaba!!
Qué malito tu hermano...
Saludos
Dina
 
Corazón me hizo llorar mal. Y años después mi planta de naranja lima también, pero fue otro llanto. Platero nunca me cayó bien, nunca pude empatizar con el burrejo ese. Igual creo que al tal Edmundo D´Amicis habría que encerrarlo y leerle sin parar sus propios relatos.
 
Yo sigo llorando hasta hoy.
Corazon ,fue el primero
El ultimo lo leo ahora y lloro
Lagrima -a la gota gorda
Y no esta mal
 
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Nihil humani a me alienum puto (Terencio)