09 diciembre, 2008

postales

"Alguien me dijo que no sirve de nada, que haya buen tiempo si no hay nada que hacer..." cantaba la Vela... y hoy, que amaneció pesado, denso, con ganas de lluvia que no se concretan, dan ganas de cantar bajo la lluvia aunque más no sea la de la ducha.
Hay quienes ruegan a dios no escuchar el deseo del turista que pide que no llueva.
A esta altura no hay ruego que valga y que llueva porque tiene que llover. (Aunque más no sea para que la vieja salga de la cueva y que sí, que no, que caiga un chaparrón arriba de un colchón, con agua y jabón.)

En el 128 las ventanas están abiertas pero da igual, no corre una brisa en la ciudad de los vientos. Hay que estar cerca de la rambla para poder sentir algo de fresco.
Atrás viaja un muchacho que hace veinte minutos habla con la novia, quejándose de todo, pero especialmente de que no nació para hablar por teléfono. Evidentemente no es para todos beneficioso el plan de hablar gratis con determinados números de teléfono por tiempo ilimitado. La cantidad de veces que se pelearon en los veinte minutos, simplemente por exceso de tiempo para hablar...

En la playa hay gente todo el día, no mucha, pero hay. Se pone lindo de tarde, cuando el sol amaina un poco y en el río abunda gente bañándose recién salida de trabajar (o eso quiero creer). Las parejas conversan tomando mate, los muchachos juegan al fútbol y si cierro los ojos puedo ver algún niño haciendo pozos en la arena, construyendo castillos o conejos.

Creo que en verano van a poner brigadas untadoras de bloqueador. Pasarán, inspeccionarán y si hay que poner, pondrán. Será por un módico precio, eso van a anunciar.

Comments:
Una de las pocas cosas lindas que recuerdo de mi viejo es que solìa cantarme aquella de: señora lluvia dame un charquito para que juegue mi botecito...Desafinaba mal, pero a mí me encantaba.
Ni hablar de las ganas de andar por aquellos pagos, pá qué.
 
Estoy de acuerdo con la inconveniencia de los planes hable gratis. En los omnibus entre la radio a todo volumen del chofer y los que hablan por celular no puedo ni leer ni escuchar mi música, que son las únicas dos cosas que me hacen más llevaderas las horas de bus. Lo de los celulares creo que es lo peor, te ves obligada a meterte en las telenovelas que se dirimen a grito pelado en pleno bus.
Cariños
 
Apenas comencé a leer, no pude evitar pensar en la policía argentina, por eso de "no sirve de nada". Allá, en mi natal Baires, quien no servía de nada, se sacaba cuatro fotos e ingresaba en el Cuerpo. Hoy en día, no creo que hayan cambiado mucho las cosas. Sólo la lluvia que cayó desde entonces....
Un saludo.
 
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Nihil humani a me alienum puto (Terencio)