08 marzo, 2010

ilusión óptica

Camino por una calle que además de ser doble mano permite estacionar en ambas aceras. Algo caótico el movimiento de los automóviles y no menos el de las personas. Una mujer camina en sentido en sentido opuesto al mío, en algunos segundos yo llegaré al punto en el que ella se encuentra y ella se habrá desplazado apenas unos pocos metros. Camina lento, apoyada en su andador. A su lado hay una señora que la acompaña. Entre ellas y yo hay tres personas detenidas. Una escribe un mensaje de texto en un celular rojo. Las otras dos están detenidas y les veo sólo el perfil, por la posición de una de ellas podría pensarse que espera a la señora que camina con el andador.
Es una joven de pelo negro, larguísimo, tiene un ramo de flores en la mano. Yo sólo veo que ella mueve la mano con el ramo de flores y asiente con la cabeza. En mi imaginación armo una historia: esta chica es la nieta de la mujer del andador y la está esperando con el ramo de flores, como si la alentara para llegar a una meta imaginaria.
Camino, avanzo y llego hasta donde están las dos mujeres, la de las flores y la otra que bien podría ser su madre. Ahora que las veo de frente entiendo todo, ambas hablan por celular. La de pelo largo y flores gesticula demasiado, yo no veía el celular y por eso imaginé que alentaba a la señora, pero nada tienen que ver. Ella gesticula y mueve la mano que mueve las flores y asiente con la cabeza. La que está al lado suyo, supongamos que fuera su madre, gesticula menos. Ambas están de perfil tanto para la señora como para mí. La señora las mira, yo las miro, yo avanzo, la señora apenas lo hace.
Me desilusiona la realidad. Tampoco era muy interesante la historia en mi imaginación. Pero seguro tenía algo de vínculo humano que la realidad no tiene.

Comments:
Excelente post, sigo el blog desde hace tiempo. Cuando leí el que escribiste sobre Zitarrosa, aún vivías en Chile (cuando extrañamos Zita canta y canta y canta).
Saludos de un uruguayo en México,
Walter
 
ojala haya llegado mi comentario
atentos saludos desde mexico
walter
 
geniales observaciones
 
"Me desilusiona la realidad" (escribiste)

y si... de otra manera sería un oxímoron existencial... (y no tengo la más puta idea de qué estamos hablando)

beso.
 
Walter:

Gracias por escribir. El comentario llegó pero yo, cansada de que aparecieran mensajes de publicidad, puse moderar comentarios y nuna me enteré cómo funcionaban. Ahora sí, los leí, los publiqué y los agradezco. Gracias por leer.

Gracias Javi también.

Daniel, la verdad es que tenés razón, me dejaste sin palabras. Supongo que soy tan ilusa que mantengo la ilusión incluso ante la contundente realidad y entonces me doy de bruces y ta, oximorono las cosas...

Saludos desde acá!
 
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Nihil humani a me alienum puto (Terencio)